Ayer iba caminando por la calle. Hacía frío y mucho viento. Cruzaba un semáforo cuando oí un estruendo y un grito de unas niñas. Miré y localizé enseguida a las niñas. Cuando llegué a su altura ví que el motivo del grito. Estaban al lado de un bloque cubierto por unos andamios. En la acera había escombros que habían caído desde arriba. Si hubiera pasado 30 segundos más tarde me habrían caído encima y habría protagonizado uno de esas noticias que dicen así: "Los escombros le cayeron encima a un viandante que pasaba en ese momento por la calle"... Afortunadamente, no fuí el protagonista de esa noticia. Tal vez mi ángela de la guarda contribuyó a retrasarme 30 segundos y me salvó la vida. Gracias, estés donde estés.
5 comentarios:
...soc la teva angela de la guarda... ho tindre en conta...un altre dia que te salvi uno de els teus superherois...:)
Prefereixo que em salvi una àngela...:)
¿pero no eras irrompible?
Es que en ese momento llevaba desactivada la invulnerabilidad.
INCREDULO!!!VES QUE SIEMPRE HAY ALGUIEN MAS,QUE NOS PROTEGE,NOS MIRA,NOS MIMA,SON LOS ANGELES DE LA GUARDA..AHORA ESPERO QUE SEAS UN POCO MAS CREDULO.TE HAN DEJADO UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD,APROVECHALA.
Publicar un comentario